Crónica III Marató del Mediterrani

Hoy he corrido la III Marató del mediterrani (Castelldefels, Catalunya), punto de inicio de mis entrenamientos de cara a todas las pruebas más duras del mundo. He hecho 2 h. 49 m. 53 s., he entrado el 8º de la general y el 2º de mi categoria.

Aquí teneis la crónica

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Extrañamente dolorosa

Las marathones tienen algo especial, cuando uno ha corrido tantas
(71 veces) es complicado dejar de hacerlo, es complicado olvidar
el ambiente y los nervios de ultima hora, es complicado olvidar el
sufrimiento, es complicado olvidar los malos o buenos resultados.
La ultima marathon de este año, fue la marathon de Helsinki, luego
por hacer carreras ultra las deje aparcadas y luego las previstas
fueron descartadas una a una por problemas fisicos.
Necesitaba volver, necesitaba recorrer esos 42 kms aun sabiendo
que el sacrificio sería hoy mayor que cualquier otro día y, por eso,
me inscribí en la la III Marató del Mediterrani (Castelldefels). Pero
hoy he aprendido a conocerme mejor en los momentos malos,
en los momentos criticos. El ser humano saca lo mejor de si en los
esos momentos, es su espiritu de supervivencia, es su espiritu
individual, valiente y de autosuperación. Hoy no he sufrido demasiado,
tampoco me he agotado en demasía, simplemente he controlado
mi dolor y mi sufrimiento, incluso por momentos parecia que
entrenaba en cualquier calle de mi barrio (aun sabiendo que en mi
barrio no existen esas playas, tan tranquilas hoy,donde transcurrio
gran parte de la marathon), por momentos parecia un simple y
despistado espectador mezclado entre grandes hombres, entre
grandes corredores, entre grandes soñadores. Por que no lo
olvidemos, la dureza sigue estando un tanto en las personas y
otro tanto en los 42 kms que les esperan.
Mi sufrimiento venia por otro lado, por que era consciente de que
correr hoy retardaria mi recuperacion, de que obstaculizaría mis
futuros sueños. Pero hoy soañaba esto y no quiero pensar en los
futuros. No me arrepiento de lo que hago ni siquiera de lo que
creo que voy a hacer. Las malas decisiones nos hacen aprender
y por eso se convierten en buenas decisiones.
Hoy ha sido un golpe de felicidad, una aire de tranquilidad que
ha inundado mi corazón, aun sabiendo que mis ritmos fueron
otros, que mis lugares un día fueron más bellos, o que mis sensaciones
un dia fueron más buenas. Pero la alegria de saber que pueden
volver a mi no muy tarde me ha engrandado, tanto que he olvidado por
momentos que hoy he corrido otra marathon, solitaria, extrañamente
dolorosa.